El segundo y tercer día de turismo en Madrid han terminado mezclados. Así que van juntitos en un sólo post.
Hace unos días fuimos al centro del turismo en Madrid, que es la glorieta de Cibeles. Desde ahí saliendo del Metro Banco de España, podemos ver, obviamente la fuente de Cibeles (en México en la colonia Roma existe una réplica de la fuente), famosa, famosa en todo el mundo, el Palacio de Correos o de las comunicaciones o próximo ayuntamiento de Madrid, el Banco de España y comenzar a caminar hacia la el Museo Thyssen-Bornemisza.
El museo tiene una gran colección permanente y una o dos exposiciones temporales. Ahora se encuentra como exposición temporal una colección de fotografías de Mario Testino, peruano altamente reconocido por su trabajo al fotografía moda y modelaje a las más famosas. Algunas fotos valen la pena, al menos por curiosidad, ya que si trabajo es también publicado por Vogue y otras grandes revistas de la moda. Y como de esto no tengo fotos les pongo unos paseitos de regreso a casa.
Sobre la colección permanente, tristemente creo que no sería ni de cerca lo que yo coleccionaría del arte y es que tuve que entrar a la página del museo para recordar lo que "más me gustó". La colección tiene mucho arte de paisajismo y jardines impresionistas y no. Y lo que me encanta, que yo hubiera tenido sólo con el primer piso, que es el arte moderno de Miró, Matisse y el Pop Art, eso sí me gusta. Igualmente paisajitos de regreso a casa.
Pasamos por la fuente de Tritón y el Museo del Prado, pero no hemos ido a él, es materia pendiente, al regreso de París, ¡sí! Vamos la siguiente semana.
Pero bueno ahora sigamos con el recorrido del tercer día de turismo. Que comenzó comiendo en el Brillante, las famosas baguettes de calamar recomendadas por mi Hermano, no hay pérdida sólo tengo uno, y bueno el brillante a parte de muy caro y muy típico, no me gustó. Comimos la baguette de calamar (2), dos cañas y unas papas bravas y fueron 18E, o sea más de lo esperado en cualquier otro lado y para no decir mmm rico, no lo vale, pero como curiosidad, oir gritar a los de la barra y pelear con sus meseros, bueno estuvo...
Foto tomada de la web
Saliendo de El Brillante, entramos al Museo Reina Sofía que en sábado después de las 230pm es gratuito hasta la hora del cierre. Este museo sí me gustó, mucho Miró, mucho arte moderno y sobretodo mucho Dalí, sí yo encantada. Vimos el Guernica de Picasso y aunque no es mi pintor favorito, verlo es una de esas pinturas que hay que ver en la vida, yo me quedó más feliz con ver a Dalí cada uno de sus cuadros después de los 30´s mejor.
La arquitectura del Reina Sofía, por dentro y por fuera también vale mucho la pena su jardín con algunas muy buenas esculturas y sus elevadores hipermodernos, me gustaron, me gustaron. Y conocí a un nuevo pinto que habrá que seguir investigando Óscar Domínguez (que acabo de descubrir fue amigo de Remedios Varo -mi pintora favorita junto con Frida Kahlo para quien no lo sepa), y en la tienda unos libros de un francés que hace dibujos muy para mí, Benjamin Lacombe.
Después de tomar un cafecito, finalizamos con la visita guiada no. de 2 que tomamos en la Fundación La Caixa, está vez, a través del cine de Fellini, muy buenos recorridos, aunque en esta ocasión mucha gente, se notó el puente en Madrid (más que interrumpido por la "huelga de controladores aéreos, sobre la que tengo mis dudas, pero ahora no es el momento). Respecto a Fellini añado que aunque 8 1/2 me parece una reverenda exageración, le reconozco su ingenio y que la Dolce Vita (1960) con su escena en la Fuente de Trevi son todo un clásico, por cierto que no fue su idea, lo tomó de una publicidad que la misma Anita Ekberg había realizado anteriormente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario