Hoy es 6 de enero y los Reyes Magos ya deben haber pasado por prácticamente todo el mundo anoche, dejando juguetes y dulces a los niños. Para que eso pasara el pequeño monstruito debió haberse portado bien y entre otras cosas, dejar su zapato y carta bajo el árbol, o haberla enviado al cielo en un globo decorado, o dejándola en algún buzón mágico, o colgando una bota/calcetín con su nombre de la chimenea u otro sitio de la casa, o poniendo galletas y leche para Melchor, Gazpár y Baltazár (si esos eran sus verdaderos nombres, claro) o para sus respectivos animalillos (que vienen cargándoles a ellos y a su oro, mirra e incienso).
Me puse a buscar sobre la historia de la tradición, tanto de la rosca como de los Reyes Magos y resultaron ambas ser caóticas, muchas historias confundidas unas dentro de las otras, muchos misterios, poca realidad, pero mucha imaginación. Así que cada uno deberá quedarse con su favorita, religiosa, mágica o simplemente tradicional.
Pero para centrarme en la rosca y no hacer una tesina sobre la teoría de los Reyes Magos, primero aclaro que entre México y España hay algunas diferencias, pero no tantas, en realidad la tradición es la misma y la receta casi. Eso sí, les digo que en Inglaterra y Francia hay un pastel similar de similares historias... y que parece que también se come en Argentina.
Diferencias, no tan diferentes:
La rosca mexicana es más ovalo que círculo, tiene sitios blancos donde sólo lleva azúcar, son más las frutas y menos las almendras, si es que lleva. La de México es más dulce a menos que se compare con la de acá que en muchos lugares sirven rellena de "nata", una especie de crema batida. En España se acostumbra comerla el 6, en México el 5 por la noche, en ambos acompañada por una buena taza de chocolate caliente.
Para mí la principal diferencia es que en México viene dentro un (o varios) pequeño muñeco en forma de bebé, que representa al niño Dios, ya cuando se ponen muy originales unos reyes magos o unos de sus animalitos o muñecos de cerámica, porque casi siempre son de plástico, para que te sepa sabroso cuando te atragantas uno. En España estos monitos están suplantados por raras figuras y, según me dijo Va. hasta dinero, dependiendo de la "fresés" (lo nice, lo pija, cara...) de la pastelería elegida para la compra y encargo (en España casi se encarga de a fuerzas, aunque hay desde días navideños, en México casi desde noviembre ya hay cientos y creo que casi nadie encargaría una, a menos que sea muy especial).
Dicen que lo de encontrarse algo dentro de la rosca empezó con una haba en tiempos romanos, y que el premiado era el "rey de reyes", por un tiempo determinado, casi siempre niños y así ya saben la tradición como "teléfono descompuesto" en nuestro querido México nos llevó a que el "rey de reyes" terminará medio castigado haciendo/comprando tamales y atole, para todos los presentes el día de la rosca, para el día 2 de febrero día de la candelaria.
Así que al que le toque el niño que me mande unos... (de verde o rajitas y el atole de guayaba o cajeta, si son tan amables). Feliz día de Reyes y coman mucha rosca, que no hay pretexto de aquí al dos de febrero para saltarse la "dieta".
Pero para centrarme en la rosca y no hacer una tesina sobre la teoría de los Reyes Magos, primero aclaro que entre México y España hay algunas diferencias, pero no tantas, en realidad la tradición es la misma y la receta casi. Eso sí, les digo que en Inglaterra y Francia hay un pastel similar de similares historias... y que parece que también se come en Argentina.
Diferencias, no tan diferentes:
La rosca mexicana es más ovalo que círculo, tiene sitios blancos donde sólo lleva azúcar, son más las frutas y menos las almendras, si es que lleva. La de México es más dulce a menos que se compare con la de acá que en muchos lugares sirven rellena de "nata", una especie de crema batida. En España se acostumbra comerla el 6, en México el 5 por la noche, en ambos acompañada por una buena taza de chocolate caliente.
Para mí la principal diferencia es que en México viene dentro un (o varios) pequeño muñeco en forma de bebé, que representa al niño Dios, ya cuando se ponen muy originales unos reyes magos o unos de sus animalitos o muñecos de cerámica, porque casi siempre son de plástico, para que te sepa sabroso cuando te atragantas uno. En España estos monitos están suplantados por raras figuras y, según me dijo Va. hasta dinero, dependiendo de la "fresés" (lo nice, lo pija, cara...) de la pastelería elegida para la compra y encargo (en España casi se encarga de a fuerzas, aunque hay desde días navideños, en México casi desde noviembre ya hay cientos y creo que casi nadie encargaría una, a menos que sea muy especial).
Dicen que lo de encontrarse algo dentro de la rosca empezó con una haba en tiempos romanos, y que el premiado era el "rey de reyes", por un tiempo determinado, casi siempre niños y así ya saben la tradición como "teléfono descompuesto" en nuestro querido México nos llevó a que el "rey de reyes" terminará medio castigado haciendo/comprando tamales y atole, para todos los presentes el día de la rosca, para el día 2 de febrero día de la candelaria.
Así que al que le toque el niño que me mande unos... (de verde o rajitas y el atole de guayaba o cajeta, si son tan amables). Feliz día de Reyes y coman mucha rosca, que no hay pretexto de aquí al dos de febrero para saltarse la "dieta".
2 comentarios:
¡Feliz día de reyes (un día después)! Es mi fiesta favorita (por no decir que realmente la única que tolero) en esta temporada. Me encantan tus lecciones de gastronomía comparada (entre otras comparaciones).
Adela,
Feliz día de reyes para ti también, por lo que leí en tu post la has pasado con maravillosos recuerdos.
Me gusta mucho cocinar y bueno la comida en general, ¿se nota? Ja, ja. Así que espero seguir con esto de la gastronomía internacional.
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